El Gobierno madrileño ha ordenado el "cierre total y definitivo" de las residencias de la tercera edad "Juan XXIII", en Alcobendas, y San Eduardo, en San Sebastián de los Reyes -ambas de titularidad privada-, al haberse detectado "graves deficiencias" en la atención sociosanitaria a los usuarios.
Así lo ha anunciado hoy el vicepresidente primero del Gobierno madrileño, Ignacio González, al término de la reunión del Consejo, que ha acordado además imponer una sanción de 120.000 euros a la residencia de San Sebastián de los Reyes y de 100.000 euros a la de Alcobendas. Esta última residencia estaba vacía desde el pasado 28 de junio, cuando el Ejecutivo regional ordenó su cierre cautelar al constatar deficiencias de funcionamiento, mientras la de San Sebastián de los Reyes albergaba a más de 60 ancianos, a los que se está instalando en otros centros privados o en casa de familiares, con ayuda de la Comunidad, que ha establecido un mes de plazo para reubicarlos.
González, que ha dicho que ninguno de estos centros tenían plazas concertadas con la Comunidad de Madrid, ha añadido que sobre la residencia de San Sebastián de los Reyes -que llevaba funcionando 15 años- pesaban "muchos expedientes y requerimientos".
Entre las deficiencias constatadas por los inspectores de los servicios sociales regionales en este lugar figuran puertas defectuosas, humedades en las salas de estar y comedores o falta de mantenimiento y de personal, todo ello considerado falta muy grave. Respecto al centro de Alcobendas, el vicepresidente ha recordado que el trato deficiente que se daba a los ancianos se descubrió a raíz de que un programa de televisión lo grabara con cámara oculta y lo emitiera posteriormente, lo que dio lugar al cierre cautelar del centro en junio pasado y a la reubicación de 56 residentes en domicilios de familiares o en otros centros privados.
