Con la filosofía de que «una sociedad justa no deja a nadie atrás», el Consejo de Ministros recuperó ayer la sanidad para todos, dejando sin efecto la exclusión de los inmigrantes simpapeles que el PP aprobó en el 2012. Justo cuando se cumplían las seis semanas de plazo que el Ejecutivo se marcó al llegar al poder para devolver la universalidad al sistema, el Gobierno aprobó un real decreto que garantiza la atención sanitaria a todas las personas que se encuentren en España, en igualdad de condiciones, y que entrará en vigor en cuanto se publique en el BOE.

El derecho se basará en la condición de ciudadanía y no de asegurado, como introdujo el Gobierno de Mariano Rajoy en plena crisis para ahorrar. Se calcula que se quedaron fuera del sistema en torno a 500.000 inmigrantes, cuyo estado de salud ha empeorado estos años. Algunos estudios cifran en un 15% el aumento de la mortalidad.

Y es que, como argumentó la ministra de Sanidad, Carmen Montón, la atención primaria permite un mejor control de las enfermedades y es «menos gravosa» que los cuidados a través de las urgencias, a los que los inmigrantes sí podían acudir. En cualquier caso, con el paso de los años todas las Comunidades Autónomas han sorteado de una y otra forma el decreto del PP, pero sin armonización y seguridad jurídica, lo que el Gobierno pretende paliar.

MÁS AYUDAS EN ESTUDIOS / Así, los inmigrantes podrán ser atendidos, sin estar empadronados o tener residencia, con un informe de los servicios sociales. Y, para evitar el turismo sanitario -el argumento que usaron los populares para aprobar el recorte-, el sistema asumirá el coste siempre que no haya un tercero (país o aseguradora) obligado al pago.

Además, el Gobierno aprobó el decreto de becas que fija en un 5 (en lugar de 5,5) la nota mínima y aumenta en 100 euros las ayudas para alumnos de rentas bajas. Y da tratamiento preferente a víctimas de violencia de género y a sus hijos al no imponerles requisitos académicos. El Gobierno destinará el próximo curso unos 10 millones de euros al incremento de las becas de los estudiantes de las familias más desfavorecidas.