Qué ser en la vida y qué estudiar para lograrlo pueden depender de una decisión a veces equivocada, tomada en la adolescencia sin las ideas claras ni la información suficiente, así que el Gobierno se plantea reforzar la orientación académica y profesional desde la Secundaria Obligatoria (ESO).

Apunta incluso la posibilidad de implantar un módulo obligatorio de "descubrimiento del mundo laboral" en el plan de estudios de esta etapa educativa, dentro del marco tutorial, y la de una "normativa estatal" sobre orientación profesional.

Todo ello con la vista puesta en el desarrollo, en cooperación con las CCAA, de un "Sistema Integrado de Información y Orientación profesional". Consta así en el Plan de Acción 2010-2011 del Ministerio de Educación para cumplir los objetivos educativos del 2010-2020, como reducir los índices de fracaso y abandono escolar prematuro, cercanos al 30%.

Ese apoyo reforzado, que proseguirá en las enseñanzas postobligatorias, pretende "facilitar la elección del alumnado entre las opciones más ajustadas a sus competencias e intereses", asesorados por orientadores cuya formación se intensificará el curso próximo con herramientas y recursos. Según las reformas, quienes no superen tercero, tendrán que decidirse entre repetir, seguir con un programa de diversificación curricular o seguir uno de cualificación profesional inicial (PCPI).