El Gobierno tiró ayer de talonario para contentar a la marea de afectados. Y lo hizo con abundante generosidad. El Consejo de Ministros aprobó ayudas a fondo perdido, créditos puente sin apenas interés, desgravaciones fiscales y exenciones de todo tipo para empleados y empresas afectadas. Los marineros y mariscadores cobrarán 40 euros diarios durante seis meses prorrogables a otros seis.

De esos 40 euros, 30 los abonará la Xunta, y los 10 restantes, el Gobierno central. A partir de ahí, todo corre a cargo de los Presupuestos del Estado. Los créditos puente podrán llegar hasta 200 millones de euros a un año prorrogable, con intereses del 1,5% y del 0%. El objetivo es que las empresas tengan dinero en efectivo a la espera de que el fondo internacional (Fidac) constituido para estos casos pague las indemnizaciones.

COBRAR PARO SIN COTIZAR

Las ayudas laborales van desde el pago del subsidio de desempleo --aunque sea sin haber cotizado lo suficiente--, a quienes acaben en el paro, a la exención de las cuotas de la Seguridad Social a las empresas afectadas, pasando por desgravaciones en el IRPF, IVA e IAE. Todo eso, además de los 43 millones de euros que donará Medio Ambiente.

El vicepresidente Mariano Rajoy no pudo evitar la comparación de la rapidez de estas ayudas con las concedidas por el Gobierno socialista tras el accidente del Mar Egeo . A su lado, el ministro de Fomento, Francisco Alvarez-Cascos, respondió con evasivas a la pregunta de por qué no hay un plan de emergencia contra mareas negras. Se limitó a citar el Plan de Salvamento Marítimo 2002-2005 aprobado el pasado mes de julio.