La Asociación de Empresas de Auxilio en Carretera de Asturias (AEACPA), mayoritaria en el sector de las grúas, decidió ayer sumarse al paro que se lleva a cabo en el País Vasco tras concluir sin acuerdo la reunión mantenida el viernes en Madrid con la patronal aseguradora Unespa. AEACPA se desmarca así de las empresas de otras ocho comunidades autónomas, incluida Extremadura, que decidieron aplazar su decisión hasta una nueva reunión que se celebrará el martes. Los gruistas, que amenazan con no retirar los coches averiados y abandonados en los arcenes, exigen una aumento de tarifas para equipararse con sus colegas europeos.

José Antonio Palmeiro, portavoz de AEACPA, afirmó que había trasladado a la Jefatura Provincial de Tráfico su voluntad de "cooperar con el ciudadano" y de realizar las labores necesarias para dejar las carreteras expeditas en caso de accidentes o averías. No obstante, consideró que la retirada de los vehículos de los arcenes "es algo que corresponde a las aseguradoras". El seguimiento de la huelga supera el 80%.

DESCAFEINADA El secretario de la Asociación Vasca de Empresas Auxiliares de Carreteras (AVEAC), Filemón Galarza, calificó ayer de "decepcionante" la oferta presentada el viernes por Unespa. "Si el martes las aseguradoras no nos ponen encima de la mesa soluciones tangibles --amenazó--, el día 25 se parará media España. Y vamos a ser muy duros porque en ello nos va el futuro". Las comunidades que podrían sumarse al paro serían Cantabria, Castilla y León, La Rioja, Aragón, Cataluña, Valencia, Madrid, Murcia y Extremadura.