Algunos grupos de fieles comenzaron a concentrarse las 23.30 horas de ayer en la plaza de San Pedro del Vaticano para rezar por la salud del Papa. Asimismo, unidades móviles de televisión y radio tomaron posiciones en las cercanías del Vaticano para seguir la evolución de los acontecimientos.

En los apartamentos en los que reside Juan Pablo II se veía luz a esa hora, algo absolutamente inusual y que demostraba la actividad que debía haber en su interior. De hecho, varios médicos del policlínico Gemelli ya se habían desplazado a la residencia papal antes de la medianoche.