Se cumplieron los peores augurios. Tras más de 20 horas de búsqueda continuada, los equipos de rescate localizaron al mediodía de ayer el cuerpo sin vida de la niña alemana de 6 años que se perdió el pasado miércoles en el Cap de Creus (Girona) cuando iba de excursión con sus padres. Un helicóptero de los bomberos de la Generalitat catalana localizó el cuerpo de la pequeña Noema en un acantilado de difícil acceso situado a unos 3,5 kilómetros del lugar donde se la vio por última vez. La familia de la niña, que estaba pasando unos días de vacaciones en un apartamento de El Port de la Selva (Girona), regresará a su país una vez se haya practicado la autopsia a la menor.

Casi un centenar de personas, entre bomberos, mossos d´esquadra, guardias civiles, miembros de la Agrupació de Defensa Forestal y voluntarios participaron a lo largo de la tarde del miércoles y ayer, desde las primeras luces del día, en las tareas de búsqueda de la pequeña.

Debido a la fuerte tramontana (viento frío y turbulento del noreste o norte, que en España sopla sobre las costas de Baleares y Cataluña), los helicópteros de los bomberos no pudieron incorporarse al dispositivo hasta media mañana, y fue precisamente uno de estos aparatos el que localizó el cuerpo sin vida de la pequeña, cuando ya se había ampliado la búsqueda a los lugares de más difícil acceso, que en un principio se habían descartado.

Algunos voluntarios participantes en el rastreo de Noema se extrañaron de que la pequeña llegara por su propio pie a un acantilado al que solo se puede acceder campo través, ya que no hay camino que lleve allí. Esta circunstancia desató especulaciones, que los médicos forenses atajarán tras practicar la autopsia. Fuentes próximas a la investigación informaron de que, en una primera inspección ocular del cadáver, no se ha detectado ningún indicio sospechoso, por lo que atribuyen lo sucedido "a un desafortunado accidente".