UN GRUPO de paleontólogos suizos exhumó ayer el esqueleto en una excavación en Ajoie, en el cantón del Jura, que dio nombre a la época del jurásico gracias a la gran cantidad de restos prehistóricos que allí se han encontrado. Tuvieron que excavar un bloque de tres tonelada para evitar dañar el esqueleto del animal, que vivo pesaba 300 kilos.