Beatriz Reyes, una de las supervivientes del accidente de Barajas, que ayudó a salvar a dos niños, ha dicho hoy que ha vuelto a nacer el 20 de agosto, día del siniestro, y que no sintió nada extraño antes del despegue hasta que "giró el ala".

Acompañada por el consejero de Sanidad de Madrid, Juan José Güemes, y del equipo médico del Hospital Infanta Sofía, donde hoy ha sido dada de alta, Beatriz ha llegado a la rueda de prensa en silla de ruedas, de la que se ha levantado por su propio pie, aunque con una ligera cojera.

Emocionada y sonriente durante casi toda su comparecencia ante la prensa, la primera que ofrece una superviviente del accidente de aviación, Beatriz ha afirmado que "ha vuelto a nacer el 20 de agosto", aunque también ha dicho sentir una inmensa tristeza por lo ocurrido.

En estos momentos, ha señalado, tiene un sentimiento contradictorio, ya que a Canarias, su tierra natal, llegan cuerpos y ella llega "caminando". La mujer, de 41 años y residente en Las Palmas de Gran Canarias, ayudó a dos menores a salir de los amasijos del avión y, según ha declarado hoy, cualquier persona en su situación hubiera hecho lo mismo.

Tras enviar un fuerte abrazo y transmitir su fuerza a todas los convalecientes, con los que espera algún día "tomar una cañita", Beatriz ha explicado que antes del despegue del MD-82 había "un ambiente normal", pero no recuerda exactamente los momentos previos ni el momento en que pasó el siniestro.

Sin embargo, cuando el avión empezó a despegar "quizás no lo hizo con tanta fuerza" como es habitual, ha agregado. La superviviente no sintió nada hasta el momento en que "giró el ala" y después notó "un golpe fuerte".

"Me bajó el estómago de golpe, me levanté, se me nubló la vista y actué de la manera que hice". De lo ocurrido, la superviviente ha dicho que quiere sacar lo más positivo, cerrar capítulo y volver a la normalidad una vez que regrese mañana junto a sus padres a Las Palmas.

Por último ha mostrado su agradecimiento a Pablo, de AENA, que le prestó su móvil para llamar a casa, a los bomberos y a todo el personal que le ayudó en Barajas.

La directora gerente del Hospital Infanta Sofía, en San Sebastián de los Reyes (Madrid), Carmen Martínez de Pancorbo, ha destacado su entereza. A esta doctora le confió su intención de volver cuanto antes a Canarias porque cree que ello le va a ayudar a superar la experiencia.

Desde el primer momento, ha dicho la médica, Beatriz ofrecía teléfonos de allegados para poder tranquilizarlos y "al segundo o tercer día ya pidió los periódicos".

Además, la médica Sonia García ha indicado que físicamente sólo le va a quedar una cicatriz en la pierna y psicológicamente habrá que esperar. El segundo paciente ingresado en este hospital, Rafael Vidal Rodríguez, de 31 años, sigue en la UCI y su evolución es lenta, pero positiva.

El herido será sometido a una nueva intervención de la fractura de tibia, ha informado la directora gerente.