Pablo Riquelme, pareja de la mujer, es un exagente de policía muy conocido en Palma de Mallorca. Hasta que abandonó la actividad policial para ponerse al frente de su propio negocio, había sido secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP) y había mantenido una intensa actividad como sindicalista.

Riquelme encabezó durante años las reivindicaciones laborales de sus compañeros y asumía un gran protagonismo en todas las negociaciones, explicaron ayer fuentes del sindicato.

Sus excompañeros no pudieron precisar el tiempo que éste llevaba unido sentimentalmente a la fallecida.