Trabajaba de barrendera en la misma urbanización del pueblo granadino de Cúllar Vega en la que vivía. Encarnación Rubio Molinero, de 46 años, harta de recibir las palizas de su marido, se encontraba en trámites de separación, pero su pareja, Francisco Jiménez, no parecía darse por vencido. Quebrantaba a menudo la orden de alejamiento que pesaba sobre él hasta que ayer decidió atropellarla hasta cuatro veces para acabar con su vida. Encarnación murió a sólo unos metros de su casa.

Eran las once de la mañana cuando, como otras muchas veces, Francisco fue a la calle del Clavel de la urbanización El Ventorrillo a sabiendas de que encontraría a su esposa, con la que ya no convivía. "¿Por qué no me coges el teléfono?", le espetó. "Francisco, ahora no, hablamos en otro momento", contestó ella.

Pese a que había sido víctima de continuas vejaciones del marido, al que el juez había ordenado que se mantuviera a más de 100 metros de distancia de ella, Encarnación no había creído oportuno cambiar de domicilio. Vivía en la misma casa que había compartido con su marido y él sabía donde encontrarla.

La negativa de su todavía mujer a hablar con él encendió su ira. Recorrió los pocos metros que le separaban del coche y Encarnación creyó que ya se iba. Pero no fue así. En vez de dar marcha atrás, Francisco siguió con su vehículo en dirección a la mujer y arremetió contra ella al menos cuatro veces, hasta que tuvo la certeza de dejarla muerta.

Un anciano de 79 años, que estaba en una parada de autobús cercana, quiso auxiliar a la mujer pero sólo consiguió resultar herido. Pronto llegaron las dos hijas de la víctima, una de ellas embarazada de pocos meses, que sufrió un fuerte choque emocional al ver el cadáver de su madre. La familia estaba pasando un mal momento porque el pasado diciembre el único hijo varón de Encarnación había muerto en accidente de tráfico junto a su novia.

SE ENTREGO El parricida terminó por entregarse a la Guardia Civil de Armilla, donde confesó el crimen, y se encuentra detenido a la espera de pasar a disposición judicial. El Ayuntamiento de Cúllar Vega ha anunciado que se personará como acusación particular y ha convocado un pleno extraordinario para este mediodía en el que se aprobará la celebración de una manifestación de repulsa que tendrá lugar por la tarde.