EL GOBIERNO tomó la decisión tras comprobar que las partidas de este pimentón con caducidad anterior al 15 de abril del 2005 tenían un alto contenido de aflatoxina, una sustancia venenosa que puede causar tumores hepáticos y hepatomas, según informaron ayer los médicos. La aflatoxina llegó a Hungría, desde Perú y Brasil, con una especie que se usa para dar más color a la paprika. EFE