Una clínica de cirugía estética de Sevilla ha sido condenada a pagar 53.634 euros a una joven de 21 años por las secuelas de una operación de orejas en asas o de soplillo, intervención que además la paciente no necesitaba.

La joven M.L.G.C., acudió el 13 de febrero de 2007 a la clínica para la corrección de un problema estético que afectaba a sus orejas, por lo que fue intervenida de ambas. El 3 de marzo requirió ser nuevamente intervenida ante las secuelas que dejó la primera intervención, sobre todo en la oreja izquierda.

La abogada demandante, María Jesús Villalpando, explicó a Efe que la Sección Segunda de la Audiencia de Sevilla no solo condena a la clínica por las secuelas sufridas, sino que además acoge la parte de su denuncia que alegaba lo innecesario de la intervención quirúrgica, pues la paciente sufría una dismorfofobia o tendencia subjetiva a verse mal.

En realidad "tenía un aspecto no solo normal, sino que se trataba de una persona hermosa que tan sólo presentaba un problema psicológico" y por ello no debió ser intervenida, dijo la letrada.