La infanta Cristina bautizó ayer, en el aeropuerto de Barcelona, el Airbus 340-600 con el nombre de Salvador Dalí. La infanta (en la foto, en el interior del Airbus, acompañada por el presidente de Iberia y el alcalde de Barcelona) llegó al mediodía con la delegada del Gobierno, el alcalde de Barcelona y el consejero de Cultura. Subió a un entarimado y tiró del cordón. Escrito en el morro, el nombre del genio. Ramon Boixadós, presidente de la Fundació Gala-Salvador, había buscado referencias aéreas en los textos de Dalí y sólo halló su miedo a volar. Fue lo más provocador en aquel acto tan formal.