La infanta Elena volverá este viernes a Nueva York, en donde Jaime de Marichalar se somete a un tratamiento de rehabilitación que supervisa el doctor Valentín Fuster. Todo lo que les pasa a los duques de Lugo es que han tenido la mala fortuna de que un accidente, en este caso vascular, haya alterado el ritmo de una vida en la que absolutamente todo parecía perfecto.

Marichalar ha experimentado una gran mejoría gracias a las sesiones de hasta cuatro horas de rehabilitación en el Hospital Monte Sinaí. Sin embargo, el tratamiento podría durar un año más debido al descuido en la rehabilitación que tuvo el duque de Lugo, al obsesionarse en demostrar que seguía siendo el mismo.

RELEVO INVOLUNTARIO

La condición de segunda en la sucesión a la Corona ha convertido a la infanta Elena en involuntario relevo de su hermano Felipe en la crónica sentimental de la familia real. Y más cuando lo más excitante que hace el Príncipe es esquiar en Baqueira, como ha hecho este fin de semana, junto a la familia Urdangarín- Borbón, niños incluidos.