Unas cámaras revolucionarias que detectan cuántas personas van dentro de un coche ayudarán a las ciudades inglesas a optimizar el uso de los carriles para vehículos de alta ocupación (VAO) y reducir así las retenciones. Leeds y Birmingham, que son algunas de las pocas ciudades que disponen de estos carriles, serán las primeras en empezar a probar las cámaras.

Los nuevos artilugios, diseñados por el profesor John Tyrer de la Universidad de Loughborough, no solo graban la imagen del coche, sino que son capaces de medir la cantidad de sangre y agua dentro de un vehículo para calcular cuántas personas viajan en él. Este sistema pretende acabar con las trampas que en Estados Unidos --donde los carriles VAO son muy habituales-- aplican muchos conductores para poder usar los carriles, como colocar un muñeco de tamaño humano o un perro grande en el asiento del pasajero para engañar a las cámaras tradicionales.

Tyrer cree que, gracias a estas cámaras, los ayuntamientos tendrán menos reticencias en construir carriles VAO. "Cuando estos carriles funcionan correctamente, realmente se puede empezar a combatir la congestión de tráfico a la entrada de las ciudades", dijo ayer el inventor.

Según los cálculos de las autoridades, cuatro de cada cinco vehículos que acceden cada día a las ciudades llevan solo un ocupante. Actualmente, solo en Leeds, Birmingham, Bristol y North Somerset hay autovías con un carril especial para coches que llevan dos o más personas a bordo. Rosie Winterton, la ministra de Transporte, aplaudió la iniciativa. "Cualquier medida para combatir las retenciones es bienvenida".