El enfrentamiento entre Nacho Cano y su amigo el constructor Carlos Durán ha hecho saltar en pedazos la fundación Sabera, poniendo en peligro la situación de las 150 niñas de la calle que la fundación atiende en Calcuta (India), según publica esta semana Interviú. Las acusaciones de irregularidades salpican a la modelo Esther Cañadas.

La revista cuenta que la actriz Melanie Griffith envió a uno de sus guardaespaldas para que investigara el conflicto en Calcuta y pusiera orden en la fundación.