Durante el registro realizado en los últimos días en la modesta casa de alquiler en la que vivía solo Volker Eckert, los investigadores han localizado "abundantes" fetiches que podrían pertenecer a otras víctimas, según indicaron fuentes conocedoras de la investigación. Entre el material encontrado en su domicilio hay ropa.
El fiscal de Hof (Baviera), Gerhard Schmitt, ofreció ayer una rueda de prensa en la que aseguró que, de momento, no hay más que la confesión del sospechoso y las fotografías de las víctimas encontradas en el camión. "Hay que comprobar la veracidad de sus declaraciones y proceder a la identificación de otras mujeres halladas muertas en ese periodo", explicó. De hecho, los investigadores están reconstruyendo todos los itinerarios internacionales realizados en los últimos años por el detenido, chófer de una empresa de transporte.
