Las trabas burocráticas que impiden en España la investigación con células madre embrionarias quedarán eliminadas esta misma semana si, como está previsto, el Consejo de Ministros del próximo viernes aprueba el decreto que la autoriza. Así lo anunció ayer en Barcelona el doctor Francisco Gracia, director del Instituto de Salud Carlos III, de Madrid, centro que coordinará dichas investigaciones. El decreto previsto desarrolla la ley elaborada en el 2003 por el anterior Gobierno, que autoriza la obtención de células madre de los embriones que estén congelados más de cinco años en las clínicas de reproducción humana españolas.

Ocho grupos de investigación adscritos a hospitales españoles, que en la actualidad desarrollan ensayos con células madre obtenidas de adultos, podrán iniciar este mismo año nuevas líneas de estudio con células embrionarias. Para hacerlo, deberán contar con el consentimiento de los progenitores donantes de los embriones y con el de los gobiernos de sus comunidades.

Entre los primeros grupos que ensayarán la aplicación de dichas células se encuentra el Centro de Investigación en Medicina Regenerativa de Barcelona, que se construye en el Parque de Recerca Biom¨dica y que, de forma provisional, empezará sus trabajos este otoño en el Hospital del Mar. Este instituto, que dirigirá Juan Carlos Izpisúa, estudiará la terapia celular en enfermedades neurodegenerativas.

Investigar con células madre obtenidas de embriones es ser coherentes con la ética, afirmó la consejera de Salud, Marina Geli, que presentó el encuentro de centros españoles que investigan sobre terapias celulares. "Lo no ético es no saber poner el límite a la investigación --añadió--. Existen argumentos éticos suficientes para decir sí a los estudios sobre medicina regenerativa".

LA CRITICA Estas células han dado lugar a una expectativa que algunos científicos definen como "exagerada". "Los estudios van a ser un complemento de los que realizamos con células madre de adultos, y nos pueden dar mucha información", dijo Salvador Martínez, del Instituto de Neurociencias de la Universidad Miguel Hernández de Alicante.

"Pero es necesario no exagerar la realidad --añadió--: las células de adulto pueden ser tan buenas como las embrionarias que, además, tienden a generar tumores cuando se las reproduce". En esos casos, añadió, es necesario modificarlas in vitro para que no degeneren en cáncer.