LA ESPERANZA de vida de las mujeres niponas ha ascendido hasta la edad de 85,99 años, con lo que siguen ocupando el primer puesto de longevidad en todo el mundo. El Gobierno de Japón atribuye la buena salud de las japonesas a la lucha contra el cáncer y las dolencias cardíacas que están convatiendo gracias a nuevos tratamientos.