Brittany Maynard, la joven de 29 años enferma de cáncer terminal que conmocionó a EEUU al anunciar su suicidio asistido para hoy, ha pospuesto su decisión para disfrutar más tiempo con sus seres queridos. "Todavía me siento lo suficientemente bien, tengo la suficiente alegría, río y sonrío con mi familia y con mis amigos, así que creo que este no es el momento adecuado", explicó Maynard en un vídeo publicado en internet. Aún así, dijo que ese día llegará porque siente que cada semana está más enferma.

El caso de Maynard ha tenido una gran repercusión mediática en Estados Unidos y ha reabierto el debate sobre el suicidio asistido en el país. El suicidio asistido es legal en sólo cinco estados de EEUU, por lo que la joven, residente de Oakland (California), se trasladó junto a su familia al vecino estado de Oregón, que sí permite esta práctica.

Además, creó el Fondo Brittany Maynard, en cuya página de internet colgó ayer el vídeo, con el fin de promover el "derecho a una muerte digna" en todo el país. En enero, poco más de un año después de casarse, se diagnosticaron un grave tumor cerebral y le quedaban unos meses.