Una puñalada en el corazón acabó ayer con la vida de Josep María Isanta Caselles, de 22 años, y tiñó de luto la Patum de Berga (Bergued ). El fallecido, vecino de la localidad, fue agredido en el transcurso de una reyerta multitudinaria iniciada por la irrupción en actitud provocadora de un grupo de jóvenes que se acercó a un recinto en el que se celebraba un concierto antifascista. El grupo cantaba consignas insultantes e increpó y empujó a los asistentes, con el ánimo de buscar pelea. Tras los incidentes, los Mossos detuvieron a 19 jóvenes, entre ellos el presunto autor de la puñalada.

La víctima recibió la herida mortal cuando intentaba socorrer a su hermano pequeño, que estaba siendo golpeado. Otros tres jóvenes, de Sabadell y L´Espunyola (Bergued ), sufrieron heridas de arma blanca, pero ayer le dieron el alta. Otros cinco sufrieron contusiones.

El escenario de la reyerta fue un terreno de la avenida del Canal Industrial, al lado de un espacio donde se celebraba el concierto antifascista, organizado por asociaciones independentistas de Berga. A la una de la madrugada se acercó al recinto un grupo de jóvenes, todos vecinos de Berga, encabezados por Santiago S. P., de 33 años, un conocido delincuente de la comarca. Según testigos, el grupo se acercó insultando, y uno de ellos llevaba una camiseta de la selección española de fútbol, lo que, según varios testimonios, "ofendió" a los asistentes al concierto, con los que, en anteriores ocasiones, algunos de los provocadores se habían enfrentado.

La pelea se desató cuando uno de los provocadores volcó un vaso sobre un asistente. "Primero se cruzaron insultos, después puñetazos y dos de los detenidos sacaron navajas", narró un responsable policial.

La víctima recibió una única puñalada con una navaja mariposa, un arma ilegal que se abre con una sola mano.