Buscaban diversión, emociones y noches interminables y se toparon con la tragedia. Un irlandés de 27 años perdió la vida y otros 24 jóvenes han precisado atención sanitaria en Ibiza entre el viernes y el lunes tras consumir de forma incontrolada diferentes drogas de diseño. Fuentes sanitarias sostienen que la causa más probable de los 11 casos que acabaron con ingresos hospitalarios fue una partida adulterada de GHB, al que se denomina éxtasis líquido, un depresor del sistema nervioso central que en gran cantidad conduce a un coma.
Según fuentes del Servicio de Salud de las Baleares, el pasado día 5 el Hospital de Can Misses registró un ingreso con síntomas de intoxicación por estupefacientes. Los mismos síntomas se repitieron con otro paciente ingresado al día siguiente, dos más el día 7 y otros siete el lunes 8 de agosto.
