Un juez de Hawái tendrá que resolver próximamente sobre el fin del mundo. De acuerdo con los demandantes --un norteamericano y un español--, el acelerador de partículas llamado LHC, una máquina experimental capaz de generar lo más parecido al big bang, podría crear un agujero negro que acabaría engullendo a la Tierra. Y, según alegan, también al universo.

Puede que la noticia, desvelada recientemente por el New York Times , parezca salida de una película de ciencia ficción de ínfimo presupuesto, pero el caso está relacionado con algo que lleva preocupando hace años: cómo valorar el riesgo de los experimentos más avanzados.