El no tener trabajo, ni dinero, no es excusa para dejar de pagar la pensión alimenticia de los hijos en una separación matrimonial. Así lo expone una sentencia de la Sección 18 de Audiencia de Barcelona, que obliga a Moisés L., de 28 años, a pasar una mínima cantidad mensual --150 euros por cada uno de sus dos hijos-- a su exmujer. "Tiene la obligación de trabajar para contribuir de forma digna a los alimentos de sus hijos", relata la resolución judicial.

Los magistrados han rechazado la pretensión de este hombre de no pagar la pensión y de que su mujer se trasladara dos veces al año a Oviedo, donde ahora reside, para que pudiera ver a sus hijos. Moisés L., alegó que no tiene empleo desde hace años y que no tiene dinero, pero la Audiencia le recriminarle que un joven como él no se dedique a buscar un trabajo para mantener a sus hijos.