La titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Girona, Inmaculada Gil, rectificó ayer y, en respuesta al recurso presentado por la Fiscalía, acordó retirar el carnet al conductor ebrio que la madrugada del pasado sábado causó la muerte de un mosso d´Esquadra al atropellarle en un control de alcoholemia en Fornells de la Selva (Girona).

Cuando el domingo la juez tomó declaración a Pere T.P., que conducía bajo los efectos del alcohol, ningún representante del ministerio fiscal compareció. Así, sin pronunciamiento del fiscal, la juez decretó la libertad con cargos y no retiró el carnet del acusado. Pese a la ausencia del fiscal, la juez tenía potestad para adoptar la medida cautelar.

Tras la polémica suscitada por esta decisión, el fiscal presentó recurso el lunes y solicitó la privación del carnet de conducir del acusado. La juez, tras el aluvión de críticas generadas por su primera decisión, decidió rectificar y estimar la medida solicitada por la Fiscalía.

La juez desconocía que el hombre tuviese antecedentes por conducir bajo los efectos del alcohol, ya que le condenaron hace más de 20 años. Sin embargo, después de que la Conselleria de Justícia i Interior anunciase su intención de presentarse como acusación particular para lograr la retirada del permiso, la fiscalía lo solicitó. Sindicatos policiales, miembros de la Generalitat, agentes y el Servei Catalá de Tránsit censuraron la actuación de la juez. Ayer, celebraron la nueva decisión.