Desde que el grupo placentino Los Dogos se fundó hasta hoy han pasado 40 años. Cuatro décadas cantando canciones de los años cincuenta a los ochenta en conciertos --salvo algunos periodos interrumpidos en que se disolvieron-- que este verano volverán a repetir porque a pesar de que sus miembros tienen entre 42 y 57 años, les mueve su pasión por la música.

En una sociedad de triunfitos son por tanto un grupo atípico porque empezaron cuatro amigos del instituto con sólo 14 años y ahora son siete, con la particularidad de que combinan las guitarras o la batería con sus profesiones, ya que hay profesores de conservatorio, empleados de Caja Extremadura, un ATS y hasta un pintor.

Pero "siempre encontramos tiempo para la música", señala Jesús Muñoz, el único de los fundadores del grupo que aún sigue en él, como guitarrista, junto a Paco (bajo), Carlos (guitarra), Juanse (piano y voz), Julián (batería), Julián S. (teclado) y Javier (cantante). Su local de ensayos, la planta baja de la casa de Jesús, no tiene nada que ver con sus inicios porque "ensayábamos en una habitación de la calle Nueva, que tenía una cuadra en la planta de abajo".

Pero entonces eso era lo de menos, como también que sus instrumentos no fueran de calidad: "Empezamos con guitarras españolas, unas pastillas que se enchufaban en una radio para que el sonido sonara eléctrico y un bongo que le tocó a mi madre. Los primeros aparatos los compramos después, pero eran muy caros y tuvimos que firmar muchas letras".

Aún así, empezaron a dar conciertos, el primero en Villanueva de la Sierra "en un baile que hacían los domingos y los fines de semana" y su look era también muy diferente del actual: "Nos llamaban los ye-yés porque llevábamos melena y cantábamos canciones de los Rolling Stones y de Los Beatles", cuenta Jesús.

Fueron otros tiempos, con muchas anécdotas para recordar, como la de que cuando eran cinco en el grupo "no podíamos ensayar porque estaba prohibido que estuvieran más de tres personas juntas en un local". Tampoco se libraron de la represión, ya que Jesús recuerda que "teníamos fama de rojos y la policía nos detenía de vez en cuando por hacer guateques, te metían miedo, pero y lo bien que nos lo pasábamos....

Tanto como ahora, siempre fieles a la música de los cincuenta a los ochenta --tienen un repertorio de 120 canciones-- que seguirán tocando y que, por su aniversario, quieren plasmar en un disco. Jesús nunca pensó que Los Dogos pudiera sobrevivir 40 años y como el resto del grupo se siente "muy orgulloso porque nos apasiona la música".