Letizia Ortiz se ha instalado en el ala de invitados del palacio de la Zarzuela mientras los servicios de seguridad preparan un dispositivo que permita a la novia del príncipe Felipe vivir fuera de la residencia real y mantener cierta independencia hasta la fecha de la boda, el próximo mes de junio.
Ayer, durante todo el día, los novios estuvieron en el despacho del Príncipe preparando con los servicios de protocolo y prensa de la Zarzuela su próxima comparecencia pública, que tendrá lugar mañana. La pareja celebrará la ceremonia de petición de mano con una comida que tendrá como escenario el palacio de la Zarzuela, aunque la sesión de fotos de los novios y sus respectivos familiares se hará en el Pardo para facilitar el acceso de los 300 periodistas que ya han sido acreditados. El palacio de El Pardo, dependencia que se utiliza como residencia de los jefes de Estado que visitan España, acoge normalmente algunas actividades de la familia real.
PROTOCOLO
Después de tres días intensos desde que se hiciera público su noviazgo, la pareja recuperó ayer una cierta tranquilidad. El Príncipe reanudó sus actividades oficiales y, por la mañana, recibió en audiencia a Alfonso Prat, presidente del Banco Central de Argentina. Aunque estaba prevista su presencia, el Príncipe no estuvo en la cena privada que los Reyes ofrecieron al presidente del Gobierno portugués, Jorge Sampaio, y su esposa, con los que mantienen una estrecha amistad.
Durante el día, Letizia, por su parte, empezó a familiarizarse con las personas que trabajan en la residencia real, con las cuestiones de protocolo y con el funcionamiento de la Casa del Rey.
El lugar en el que vivirá la prometida del Príncipe hasta su boda es una de las cuestiones que han de resolverse en los próximos días. Desde el pasado sábado por la mañana, Letizia ocupa una habitación del ala de invitados de la Zarzuela. Los servicios de seguridad están estudiando la posibilidad de que Letizia vuelva a su casa del barrio madrileño Valdebernardo o bien que se instale en casa de su madre, situada en la misma zona de Madrid.
MANTENDRA SU INDEPENDENCIA
Letizia quiere mantener en estos meses previos a la boda una cierta independencia y, de acuerdo con el Príncipe, ha decidido vivir fuera de la Zarzuela.
Prueba de que Letizia desea manejar por sí misma sus asuntos, al menos durante unas semanas, es que contesta personalmente a las llamadas que recibe en su teléfono móvil habitual. Ayer mismo contestó a una llamada de Blanca A. Gutiérrez, redactora del diario La Voz de Asturias. Letizia mostró su orgullo por ser "la primera Princesa de Asturias, asturiana". En un mensaje dirigido a sus paisanos, la prometida de Felipe de Borbón dijo que Asturias ha estado presente en su vida y que espera ser digna de su responsabilidad.
