Adolfo Juan Luna (21) y Cristina Turégano (18) son dos jóvenes golfistas criados en Extremadura que han conseguido una beca para estudiar en la Universidad CEU San Pablo de Madrid gracias a un acuerdo promovido por la Real Federación Española de Golf. Ambos comenzarán sus estudios en grado de Periodismo y simultáneamente se prepararán para participar en torneos de alta competición. Esta iniciativa de la federación está basada en el modelo académico-deportivo estadounidense por el que los deportistas pueden estudiar y competir.

El inicio de ambos en el mundo del golf fue por sus familias. "Yo de pequeña, cuando tenía cinco años, porque jugaban mis padres y mi hermano y me metieron en clase, me gustó y seguí con ello", declara Cristina. "Yo de familia, somos todos golfistas y cuando vinimos a Cáceres, porque soy de Madrid y trasladaron a mi padre, entonces empecé a jugar aquí porque era mucho más barato. Tenía doce años", afirma Adolfo.

La universidad le pondrá todas las facilidades posibles para que puedan compaginar sin ningún problema su pasión por el golf con los estudios. "Tendremos un tutor para que recuperemos todas las clases a las que no podamos asistir y cambio de exámenes en caso de que disputemos algún torneo. La verdad que está todo muy bien preparado para que te saques la carrera sin problema, que es lo importante", dice Adolfo. "Además yo también trabajo en la Federación y de las cuatro semanas que tiene el mes voy a asistir a clase dos como máximo", añade.

A pesar de tener facilidades ambos tendrán un horario muy estresante. Por las mañanas acudirán a clases en la facultad y, a continuación, realizarán entrenamientos de golf, alrededor de tres a cuatro horas. Mientras, las tardes las dedicarán unas dos horas a la preparación física.

La elección de estudiar periodismo ha sido por diversos motivos. "La verdad que yo no sabía que estudiar. Me estuve informando y me pareció interesante y fácil de compaginar con la alta competición", dice Cristina. Mientras a Adolfo siempre le ha gustado. "Me encantaría ser corresponsal deportivo, en caso de que no pudiera jugar al golf profesionalmente", afirma.

Los dos afrontan esta nueva etapa de su vida con mucha ilusión. Cristina va a notar más el cambio que Adolfo, que ya está acostumbrado a residir en Madrid debido a que consiguió ser becado con la ´Beca Blume´ con tan sólo 16 años y además seguirá con sus abuelos, mientras que Cristina se alojará en un colegio mayor. "Para mí es seguir con la misma dinámica que hasta ahora", afirma Adolfo. "Yo tenía ganas de irme porque aquí sólo tenemos un campo y en Madrid tendré a mi disposición varios y mejores profesores que aquí", declara Cristina.