Ya están aquí. Y, de momento, no han quitado las ganas de fumar. Las cajetillas de tabaco que incorporan las nuevas advertencias sanitarias --fumar puede matar -- ya están a la venta en España, aunque no de forma masiva. Sólo algunas marcas pequeñas como Coronas, Lola, Krüger, Davidoff KS y Diana y otras más grandes, como Camel y Lucky, han rediseñado su formato para adaptarlo a la nueva norma, que tiene como fecha tope el 30 de septiembre.

El decreto, publicado en octubre del 2002, ha provocado que todas las tabaqueras tengan que rediseñar las cajetillas. Los paquetes tendrán unas advertencias sanitarias más duras que ocuparán el 30% de la cara anterior y el 40% de la posterior. Además, los mensajes estarán recuadrados e impresos en negrita.

Fuentes de Altadis --compañía que comercializa Fortuna, Nobel, Ducados y Habanos-- y Philip Morris --Marlboro, Chesterfield y L&M-- explicaron ayer que las marcas que se han adelantado son las que tienen un índice de venta menor. En cambio, las más adquiridas por los consumidores pueden tardar un poco más porque se suministran con mucha frecuencia en los puntos de venta. Por ejemplo, Altadis sólo ha puesto a la venta cajetillas de Davidoff KS y Diana. Pero todavía no ha tocado los buques insignia: Fortuna, Ducados y Habanos.

Ninguna tabaquera quiso valorar el decreto, que forma parte de la ofensiva de Sanidad contra el tabaco y que adapta a la legislación una directiva europea. "Simplemente lo acatamos", añadió un portavoz de Philip Morris. Según las empresas, aún es pronto para calcular el impacto económico de la ley.