El drama de los inmigrantes indocumentados que llegan o intentan llegar a España después de una dramática travesía por mar se desarrolló ayer en tres frentes. Por un lado, agentes de la Guardia Civil localizaron por la tarde a ocho de los 70 que desembarcaron a primera hora de la mañana en una playa de Barbate; todos mayores de edad y marroquíS. En Menorca, la policía detuvo a 10 ocupantes de la embarcación procedente de Argelia que el viernes tocó tierra entre Son Saura y Cala Vell. Y en un tercer escenario, Salvamento Marítimo suspendía las labores de búsqueda de los que el jueves naufragaron en Tenerife.

La Guardia Civil sigue buscando a los más de 60 inmigrantes que huyeron nada más desembarcar en la playa de Hierbabuena, en Barbate. Se desconoce la procedencia de la embarcación. Las ocho personas detenidas fueron trasladadas a un módulo de salvamento de la Cruz Roja, donde fueron sometidas a examen médico, y luego pasaron a custodia policial. La lancha neumática de nueve metros de longitud en la que se desplazaban fue abandonada muy cerca del pinar, donde se concentra el trabajo de rastreo de las autoridades.

En Ciutadella, tres extranjeros fueron detenidos el viernes por la noche cuando intentaban subir a un ferri con destino a Mallorca, y otros siete ayer por la mañana, cerca del puerto. Mientras, los 13 que el jueves pasado desembarcaron en la costa de Llucmajor, en Mallorca, fueron trasladados a Barcelona. Ayer se suspendió la búsqueda de supervivientes después de rescatar a 48 personas. La decisión, señalan, se debe al estado de la mar y porque han pasado más de dos días.