El cine español ha perdido la vergüenza y ya se atreve a tratar temas que antes se antojaban como impensables. El género fantástico es uno de ellos. Atrás quedan los tiempos en los que Paul Naschy se empeñaba, casi en solitario, en rodar películas de terror más voluntariosas que certeras.

Alex de la Iglesia fue uno de los responsables del renacer de este cine casi olvidado con títulos como Acción mutante y El día de la bestia . Precisamente, uno de los protagonistas de este último filme, Santiago Segura, se ha lanzado a la aventura de producir por primera vez en solitario la inclasificable Una de zombis .

El filme, en la línea de la reciente Mucha sangre , combina terror con humor desmadrado y casposo siguiendo las peripecias de dos freaks veinteañeros que quieren triunfar como cineastas pero carecen de dinero y, lo más importante, de talento. Una escultural ejecutiva intenta ayudarlos por oscuras razones. Pero, para conseguir rodar su primera película como directores, deberán acabar con una mafia satánica compuesta por unos gánsteres asesinos que han conseguido salir de la tumba para conquistar el mundo.

PROTAGONISTAS Los protagonistas son actores jóvenes, en su mayoría debutantes: Miguel Aparicio, Miguel Angel Aijón, Salomé Jiménez y Mayte Navales. Para compensar su falta de tirón popular, el reparto se nutre con apariciones de los amiguetes de turno como el propio Segura, Gabino Diego, Florentino Fernández y Pepe Navarro, entre otros.

El director es Miguel Angel Lamata, realizador de diversos cortometrajes como Rencor visceral y Robando el rock and roll . Sangre, vísceras, escatología, heavy metal, chistes pasados de rosca y dosis de mal gusto. Almas sensibles, abstenerse. Por mucho que se estrene en Navidades, no se parece en nada a Mary Poppins .