La asociación católica Unión Lumen Dei, de corte ultraconservador, ha logrado tras meses de tira y afloja con el Vaticano, que la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica de la Santa Sede acepte la renuncia del comisario pontificio nombrado para tutelar la entidad, el arzobispo emérito de Pamplona Fernando Sebastián, cuya actividad se ha visto obstaculizada por los dirigentes de la asociación.

Lumen Dei, con unos 700 integrantes entre sacerdotes, monjas y laicos, fue intervenida hace un año por el Vaticano, para aclarar las acusaciones de irregularidades econó- micas y escándalos sexuales lanzadas por exmiembros contra sus dirigentes. La asociación católica, creada hace más de 40 años, mantiene su sede en España, aunque gran parte de su labor se desarrolla en Latinoamérica.