Los servicios de aduanas marroquíes destruyeron hoy en Kenitra, unos 40 kilómetros al norte de Rabat, siete toneladas de estupefacientes de los que se incautaron recientemente en esta región durante operaciones antidroga.

La maniobra fue supervisada por la Fiscalía y por una comisión mixta determinada para este fin, según indicó un comunicado emitido hoy por la Administración marroquí de Aduanas e Impuestos indirectos.

También hoy, 69 personas miembros de fuerzas militares, así como dos abogados y otros 21 civiles fueron presentados ante la justicia marroquí, tras el desmantelamiento, el pasado 13 de enero, de una red de narcotráfico a nivel internacional.

Las operaciones realizadas en los últimos meses forman parte de la estrategia de los poderes públicos para acabar con el tráfico de drogas en Marruecos.

A lo largo de 2008, las autoridades del país se incautaron de 110,893 toneladas de hachís, 33,584 kilogramos de cocaína, 6,28 kilogramos de heroína y 43.510 unidades de pastillas de droga.