"Estoy enamorada de El Chaboli. Si Dios quiere, podremos casarnos prontito y tener una casita en Cádiz". Dicho y hecho. Tras cuatro años de noviazgo, Niña Pastori y El Chaboli unieron el sábado sus vidas (en la foto, la pareja tras contraer matrimonio) en una boda con la que intentaron no levantar la liebre pero que irremediablemente se convirtió en un secreto a voces. ¿Cómo encubrir semejante acontecimiento en San Fernando, el pueblo gaditano donde María Rosa García García fraguó su cálida voz con la admiración confesa del propio Camarón?

Más de 5.000 personas coreaban el nombre de María a las puertas de la parroquia de San Pedro y San Pablo ante la veintena de policías que integraban el dispositivo habilitado para controlar el baño masas. Un dispositivo que, según confesaban fuentes policiales, se había quedado corto.

Y llegó la avalancha. Poco antes de la siete de la tarde, el coche del novio bajaba por la calle Real. Las vallas protectoras no impidieron que la muchedumbre comenzará a correr en dirección del perplejo Julio Jiménez Borja, El Chaboli, hijo del mítico Jeros de Los Chichos --el de en medio que Estopa homenajeaba.

El diseñador Tony Ardón había diseñado los trajes de los novios. Para El Chaboli, chaqueta de terciopelo negro y chaleco y corbata morados. La boda fue íntima y breve. Los invitados se acercaban escasamente al centenar, entre los que se encontraban los integrantes del grupo Ketama.