Firmaba su ropa interior para que no se perdiera entre las coladas de los estudios. Envolvía a algunas de sus muñecas en auténticas y carísimas pieles. Estaba tan cómoda en vestidos de noche como con sencillos tejanos. Acostumbrada a hacerse esperar, recibió de su segundo esposo, Joe DiMaggio, una polvera de oro con reloj incrustado --uno de los 400 objetos que se exhiben en California-- con la inscripción: "A Marilyn. Espero que esto te ayude a ser puntual. Todo mi amor. Joe".

Era Marilyn Monroe, una estrella de la que, 43 años después de su muerte, aún se puede descubrir algo nuevo. Una exposición organizada a bordo del Queen Mary en Long Beach representa la última puerta de entrada al universo del icono.

A esta muestra no le falta la controversia. Tras la exhibición está Robert Otto, un coleccionista de Chicago que era un desconocido en el universo de los entregados a Marilyn hasta el año pasado. Según el propio Otto, él lleva 37 años haciéndose con piezas relacionadas con la artista. Sin embargo, según los competidores de Otto, en el mundo de la memorabilia, plagado de imitaciones y falsificaciones, es difícil saber si las piezas fueron usadas por la artista. Los objetos de la exposición son, por ejemplo, joyas, el certificado de matrimonio, en el que firmó con su nombre real (Norma Jeane Mortenson), un anillo regalo de DiMaggio, los guantes y el bolso que llevó el día de su boda, y el Rolex que regaló a Kennedy.

BELLEZA ORIENTAL Mireia Verdú posó ayer en los jardines del parque Miss Mundo que ha inaugurado en la isla china de Sanya. La primera dama de honor de Miss España es una de las favoritas para lograr hoy la corona de belleza mundial. Verdú representó a Lleida en el certamen.

HOSPITALIZADA La aristócrata Pitita Ridruejo, de 72 años, se recupera de un infarto cerebral por el que fue ingresada el domingo en la Clínica Ruber de Madrid.