Un hombre de 78 años se ha entregado esta tarde a la Guardia Civil tras asesinar con un arma blanca a su esposa, de 76, en el domicilio de su hija, situado en la localidad cántabra de Puente Arce, en el municipio de Piélagos.

La fallecida había presentado el pasado 25 de octubre una denuncia contra su marido por amenazas y éste no podía acercarse a ella a menos de 200 metros, según ha informado la Delegación del Gobierno en Cantabria. Este es el primer homicidio por violencia doméstica que se registra este año en Cantabria.