Una encuesta revela que los extremeños suelen ir entre 2 y 4 veces por semana al bar en verano. Los mismos entrevistados aseguran que durante el resto del año acuden a los bares 1 o 2 veces (38%). El 53% de los entrevistados coinciden en que la cerveza es la bebida "estrella" del verano. El Barómetro del Verano, promovido por Cerveceros de España, revela las preferencias que tienen los extremeños a la hora de acudir a los bares. Desvela la prioridad de los ciudadanos en cuanto a la bebida, compañía y lugar donde pasar su tiempo de ocio. El estudio explica que los gustos de los extremeños cambian durante estos meses de verano en los que el calor es el gran protagonista. Por ello en el período estival la frecuencia con la que los extremeños van a los bares aumenta.
El lugar escogido para compartir una bebida son los chiringuitos y las terrazas, ya que los extremeños prefieren "disfrutar" del aire libre. Los entrevistados catalogan a estos espacios como el sitio " idóneo" para reunirse con los amigos.
Según el estudio, los aspectos que más se valoran a la hora de acudir a los bares son disfrutar del aire libre, estar más fresco y ser un buen lugar de reunión ya sea con los amigos o familiares.
El Barómetro del verano indica que el 82% de los extremeños suelen tomar algo de comer con la bebida. Las tapas más comunes son aceitunas, patatas fritas y frutos secos.
La encuesta también se hace eco de la compañía que eligen los entrevistados para acompañar su bebida. El 84% de los extremeños desvela que los amigos son la compañía "ideal".
Después de los amigos van los compañeros de trabajo o clase y los familiares como idóneos para compartir una cerveza.
El director general de cerveceros de España, Jacobo Olalla Marañón, comenta que "sin duda compartir una cerveza acompañado de nuestra gente y con una tapa sigue siendo la mejor forma de disfrutar del verano y combatir las altas temperaturas". Añade que este estudio "ratifica" que los patrones de consumo de cerveza de los extremeños están "muy ligados" al estilo de vida mediterráneo.
La cerveza forma parte de la dieta mediterránea y está elaborada a partir de ingredientes naturales como el agua, cebada y lúpulo. No contiene grasas y aporta vitaminas, minerales y antioxidantes. Existe una variedad sin alcohol de la que España es el mayor consumidor de la Unión Europea.
Contra el tópico del aporte calórico de la cerveza, la comunidad científica afirma que una caña tiene 90 calorías. La cerveza sin alcohol tiene un aporte aún más bajo (menos de la mitad) . La comunidad científica afirma que "no se puede culpar a un alimento o bebida de los kilos de más, sino a una alimentación poco equilibrada".
