Kate y Gerry McCann han contratado a sus propios expertos forenses en un intento de refutar las sospechas de la policía portuguesa de que el matrimonio británico tuvo algo que ver con la desaparición de su hija Madeleine el 3 de mayo en aquel país, informa el diario "Evening Standard". Se trata de la última maniobra ideada para "limpiar sus nombres" por parte de los abogados de los McCann, que, según el vespertino londinense, realizaron la pasada semana un viaje secreto a Praia do Luz para investigar el apartamento de vacaciones del que desapareció la pequeña y entrevistarse con sus colegas portugueses.

La firma legal que asesora a la pareja, Kingsley Napley, una de las más conocidas del Reino Unido, ha recurrido, según el periódico, a su propio equipo de expertos forenses después de que se encontraran muestras de ADN de la niña, incriminatorias para los McCannn, tanto en el apartamento como en el coche que alquilaron veinticinco días después de la desaparición. Según fuentes citadas por el "Evening Standard", el Servicio Forense de Birmingham, que ha examinado el ADN encontrado, ha llegado a las mismas conclusiones que la policía portuguesa, que considera a los McCann como "sospechosos" en ese caso.

Una fuente próxima al matrimonio dijo al "Evening Standard" que los expertos forenses contratados demostrarán que las muestras halladas en el apartamento y el coche de alquiler no son indicativas de la culpabilidad del matrimonio, a quien algunos medios portugueses acusan de haber dado muerte accidentalmente a su hija para hacer desaparecer luego el cadáver. Los McCann han protestado una y otra vez de su inocencia y dicen estar convencidos de que Madeleine fue secuestrada por alguien que había sometido a estrecha vigilancia durante varios días el apartamento de vacaciones que alquilaron en la citada localidad del sur del Algarve.

El equipo legal que trabaja para el matrimonio confía en poder convencer al nuevo funcionario de la policía portuguesa encargado del caso, Paulo Rebelo, de que debe dar un nuevo enfoque a la investigación para centrarse en la búsqueda de la niña. El matrimonio McCann está supuestamente desesperado por el hecho de que hasta ahora la policía del país ibérico se haya centrado en ellos en lugar de en la búsqueda de la niña, lo que, en su opinión, ha obstaculizado las pesquisas.