--¿Qué ha sentido al regresar a Don Benito?

--Muchos recuerdos y emociones. Hacía que no venía veintiún años, cuando me nombraron Hija Predilecta de la ciudad y pusieron mi nombre a una calle. Aquí tengo enterrados a mi padre, mi hermana y mi abuela. Estoy muy contenta pero también muy triste porque me fui muy pronto, cuando tenía veinte años y ya hace sesenta que falto de mi pueblo.

--Regresa para participar en la obra de teatro por el 150 aniversario de la concesión del título de ciudad?

--Es un honor que me llamen para representar a Isabel II, porque además yo soy muy monárquica, bueno, más bien juancarlista. Aunque estoy mayor y la pierna la tengo para tirarla.

--¿Ha cambiado mucho la ciudad?

--Lo poco que he visto sí.

--¿Qué le gustaría hacer durante su estancia?

--Poco con mi edad y la pierna. Cuando me fuí sí, porque era la niña más bailona. Pero en aquella época te criticaban todo y para bailar a gusto tenía que irme a Villanueva. No es que despreciara mi pueblo, que ha sido muy importante, pero te criticaban, y lo hacían porque era muy guapa y muy pobre.

---¿Qué recuerdos tiene?

--Malos, pero también buenos. Había un dentista, Ricardo Barroso, y su mujer doña Concha Estrada, que me querían con locura. Y me llevaban a Villanueva de la Serena a bailar a mí y a mi hermana. Llegaba a las once de la noche. Vivíamos entonces en la calle Palomar y estaban las cotillas en las ventanas y yo las decía "abrid las ventanas que os vais a pillar la nariz". Mi primer novio era de Villanueva y su madre no me quería por guapa y pobre.

--Usted fue una adelantada a su tiempo.

--Sí. De haber nacido en esta época hubiera hecho lo mismo porque yo he roto moldes. Era adelantada porque no creo que hiciera nada malo. He hecho mucho bien a mi familia. Mi madre, que la llamaban "la guapa", se quedó viuda a los 40 años con cinco niñas y sin recursos. Dejé de estudiar y me puse a trabajar hasta que me hice artista.

--¿Se siente extremeña?

--Estoy muy orgullosa de serlo. Y creo que el que nace honesto, es el ser más hermoso de la creación, y el más hidalgo.