Una niña de 4 años murió ayer ahogada en la piscina municipal de Ripoll durante una actividad escolar. La menor participaba en un cursillo con otros 26 niños de la clase. En el momento del suceso, estaban en el lugar cinco profesores y cuatro monitores con titulación de socorrismo. Con este caso y el de otro menor que falleció en Órgiva, también ayer, son ya cuatro los niños de corta edad muertos ahogados este año.