Al menos 17 niñas murieron y otras 27 resultaron heridas al derrumbarse en la madrugada de ayer una residencia femenina de estudiantes de una fundación coránica en la provincia turca de Konya (Anatolia Central), según informó el ministro del Interior, Besir Atalay.

El alcalde de Taskent, Abdulbaki Acet, explicó que el hundimiento del edificio de tres pisos fue debido a un escape de gas. Además, añadió que unas 50 niñas, de entre 8 y 16 años, dormían en la residencia que se derrumbó hacia las cuatro o las cinco de la mañana de ayer (1.00 - 2.00 GMT).

Las niñas habían sido enviadas a esta escuela coránica de verano, propiedad de una fundación religiosa privada, para recibir cursos sobre religión musulmana.

"Una de las profesoras dijo que había salido algo de gas de la cocina", explicó M.A., una de las supervivientes de 12 años por lo que "comenzó a llegar un olor a gas de los dormitorios de abajo y enseguida se produjo una explosión muy violenta", añadió.

Las menores y el personal de la residencia heridos fueron trasladados a los hospitales de la región. De ellos, cinco se encuentran en estado grave. Ayer por la tarde todavía seguían atrapadas en las ruinas entre 5 y 10 personas.