Dos jóvenes holandeses de 17 y 13 años fallecieron la pasada madrugada a causa de las heridas que sufrieron al manipular unos fuegos artificiales artesanales para festejar el Año Nuevo, según informa la agencia ANP.

La agencia holandesa precisa que un joven de 17 años falleció en Tolbert, al norte del país, tras resultar herido por la explosión de un cohete artesanal, según confirmó la policía de la provincia de Groningen.

La otra víctima, un menor de 13 años, perdió igualmente la vida en Harderwijk (centro del país) durante las festividades de la Nochevieja tras resultar herido al explotar los fuegos artificiales artesanales que manejaba.

Por otra parte, la celebración del Año Nuevo ha dejado a varios policías heridos en enfrentamientos registrados en las grandes ciudades de Holanda como La Haya o Rotterdam.

En La Haya se contabilizaron hasta 40 vehículos incendiados, frente a la veintena registrada el año anterior, concluye la agencia neerlandesa.