Una vecina de Banyoles de 37 años y de nacionalidad marroquí ha dado a luz a cuatrillizos, tres niños y una niña, en el Hospital Josep Trueta, de Girona.
Lo excepcional este embarazo, según dijo hoy el coordinador de la unidad de Obstetricia del hospital, Josep Maria Ramos, es que ha sido una gestación espontánea, sin intervención de la ciencia, lo que se da en uno de cada 600.000 casos.
Los cuatros bebés nacieron ayer por la mañana a las 33 semanas de gestación mediante una cesárea programada para evitar posibles complicaciones, tanto en el parto como en el post-parto, y pesaron entre 1.285 y 1.560 gramos.
Durante el embarazo no se produjo ningún problema, a pesar de que la madre pasó los últimos dos meses ingresada en el hospital para evitar un parto prematuro.
Los bebés, Mohamed, Youssef, Anass y la niña, Imane, que ahora se encuentran ingresados en la Unidad de Neonatología del hospital, deberán permanecer en la incubadora hasta que pesen 1.800 gramos, y está previsto que en total estén durante un mes en el centro sanitario.
Fuentes del centro han señalado que dos de los bebes han nacido con una inmadurez pulmonar y cuentan con un soporte respiratorio.
La madre se está recuperando durante el día de hoy de una pequeña intervención que le han tenido que hacer esta mañana para drenarle un hematoma que le había salido a raíz de la operación quirúrgica a que fue sometida ayer.
Los padres de estos cuatrillizos, que ya tienen otro niño de dos años y medio, viven en un tercer piso de un inmueble viejo y sin ascensor.
El padre, Mohamedi Dahman, que trabaja en un matadero, cobra unos 850 euros mensuales, cantidad con la que ve muy difícil poder sacar adelante su numerosa familia.
Dahman ha hecho un llamamiento a las administraciones para que le ayuden ante esta nueva situación y desde el centro sanitario han informado de que tanto el departamento de Salud como el Ayuntamiento de Banyoles ya se han mostrado receptivos a la posibilidad de ayudar a la familia.
