El alcalde de Murcia, Miguel Angel Cámara (PP), ordenó ayer a la policía local la detención y entrega a la Policía Nacional de los grupos de sin papeles trasladados a esa ciudad desde Canarias por el Ministerio del Interior. Cámara, otros alcaldes del PP y el presidente autonómico, Ramón Luis Valcárcel, acusan al Gobierno de enviar en los últimos meses a grupos de inmigrantes sin avisar ni prever ningún dispositivo para su acogida, pero sólo el primer edil de Murcia ha optado por dar una respuesta policial al problema.

La indignación de los dirigentes murcianos se desató a raíz de la situación vivida por 20 subsaharianos procedentes de Fuerteventura a los que Interior dejó el pasado miércoles abandonados a su suerte en el aeropuerto de San Javier. Nada más bajar del avión, la policía les indicó que se dirigieran andando por la carretera hacia un puesto de la Cruz Roja, situado a tres kilómetros.

Cuando llegaron, el puesto estaba cerrado. Algunos iban descalzos y ninguno disponía de agua, dinero o comida. Tras dos horas de espera, apareció el responsable de la Cruz Roja, pero les avisó de que no podían quedarse.