Un hombre y una mujer murieron el pasado jueves por la noche en la autopista A-8, a su paso por la localidad guipuzcoana de Elgoibar, al colisionar el coche en el que viajaban con un vehículo cargado de droga que circulaba en sentido contrario para escapar de un control de la Guardia Civil. El kamikaze, que fue detenido junto con otros cuatro, recorrió 10 kilómetros por la autopista a gran velocidad en un todoterreno de lujo.

El narcotraficante, de origen magrebí, transportaba 30 fardos de hachís --una tonelada de peso en total-- en un Volkswagen Touareg de matrícula francesa. Sus cuatro cómplices viajaban unos metros por delante en un vehículo lanzadera, desde el que le advirtieron de la presencia de un control que la Guardia Civil había dispuesto en plena autopista, a la altura de la localidad guipuzcoana de Deba. Después de recibir la alerta, el todoterreno maniobró en ese mismo punto para poner el coche en dirección contraria.

Cargado con el hachís adquirido supuestamente en Marruecos para su posterior venta en Francia, el conductor del todoterreno emprendió la huida. Ya en Deba provocó un primer accidente cuando el conductor de un turismo tuvo que salirse de la calzada para esquivar al vehículo del fugitivo y esquivar la colisión. El accidentado resultó herido y tuvo que ser hospitalizado.

Minutos después, sobre la una de la madrugada, el conductor del todoterreno provocó el accidente fatal, al impactar de frente con un turismo Rover, con matrícula de San Sebastián. Como resultado del brutal impacto, los ocupantes del coche, J.M.T.V., vecino de San Sebastián de 33 años, y M.T.R.B., una mujer de

35 años residente en el municipio navarro de Azagra, fallecieron en el acto. Los cadáveres de las víctimas tuvieron que ser extraídos por los bomberos del vehículo, que quedó completamente destrozado.