Dos bangladesís que han vagado durante 10 días por el desierto tras ser expulsados por Marruecos en la reciente operación de limpieza de inmigrantes fueron encontrados ayer y conducidos a Bir Lehlu, a 63 kilómetros del muro que divide el Sáhara Occidental, ya en territorio controlado por el Frente Polisario.

Exhaustos, heridos, sedientos, hambrientos, llorando y con signos de hipotermia, Mohamed Arif, de 23 años, y Arum Mandol, de 32, estaban "a punto de morir", según especialistas de Médicos del Mundo y Cruz Roja, que atendieron en primera instancia a los dos inmigrantes asiáticos.

La historia es la misma que la de muchos de sus compatriotas, captados en el país de origen por mafias interconectadas con Marruecos. Cada uno de ellos pagó unos 10.000 euros por la cruel estafa que incluía billete de avión de Bangladesh a Doha (Qatar) y otro de allí a Casablanca (Marruecos), donde les esperaba un supuesto trabajo que nunca existió.

"Nuestros pasaportes desaparecieron y comprendimos que nos había engañado", relató Arif, el único de los dos que aún podía articular palabra. "Entonces fuimos a un puesto de la policía en Casablanca para que nos ayudaran y nos respondieron con patadas. Luego estuvimos en un campamento, no podría decir dónde. Eso fue antes del Ramadán. Cuando empezó el Ramadán, nos echaron por el muro con una botella de agua para cada uno que se acabó ese mismo día", narró.

Las patrullas del Polisario los encontraron ayer, después de 10 días de peregrinaje, 100 kilómetros al Norte de Bir Lehlu, cerca de la frontera argelina. Si pudieron sobrevivir fue porque al tercer día vieron a un beduino que les dio algo de agua y comida. "No mucho, porque él tampoco tenía demasiado", dijo Arif.

Nada más llegar al campamento de acogida montado por los saharauis, donde ya hay 97 inmigrantes, el nigeriano Destiny Afred, dijo conocer a Arif. "¿Te acuerdas de mí?", le preguntó. "Sí, claro", respondió él. Afred asegura que estuvo con el bangladesí hace un año en una casa abandonada en Gao, en Malí. Ahora el destino de los dos es incierto.