Tras un mes de relativa tranquilidad, la neumonía asiática ha reaparecido con gran virulencia en Toronto. En las últimas horas las personas que se sospecha están infectadas han pasado de 4 a 25. Se teme que dos muertes ocurridas en el Hospital Monte Sinaí de esa ciudad se deban al Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS), lo que elevaría a 26 las víctimas mortales en Canadá.

Los médicos temen que dos ancianos fallecidos hace varias semanas padeciesen la neumonía asiática, que empezó a detectarse en Toronto el pasado 26 de marzo. Según el doctor Donald Low, jefe de Microbiología del Monte Sinaí, un anciano que fue hospitalizado el 22 de abril por una fractura de pelvis estaba infectado con SARS. Sin embargo, en el hospital nadie se percató de ello.

El anciano falleció y aún es un misterio cómo pudo contraer la neumonía. Pero se sospecha que el anciano ha podido contagiar al personal sanitario y a otros enfermos, no sólo de ese centro sanitario, sino también del hospital North York de donde procedía el paciente. Del otro anciano que pudo morir por el SARS no se facilitó ninguna referencia.

De momento, las autoridades sanitarias canadienses han solicitado a los cientos de personas que visitaron los dos hospitales de Toronto desde principios de mayo que inicien una cuarentena voluntaria. Quienes sufran algunos de los síntomas iniciales de la neumonía asiática, como fiebre alta o dificultad respiratoria, deben ponerse en contacto con los servicios médicos.

Mientras, en China, donde surgió esta enfermedad siguen contabilizándose bajas. En Pekín han muerto tres personas en las últimas horas y otras dos en el interior del país.