La nieve que ha azotado estos días buena parte de Europa y Estados Unidos se ha manifestado también en un lugar tan insólito como el Sahara. El desierto africano, que también puede sufrir en invierno olas de frío, fue escenario de una nevada el pasado 7 de enero. Se trata de la tercera nevada en 40 años.

La extraña tormenta tuvo lugar en las inmediaciones de Ain Serfa, una ciudad situada en la zona argelina del desierto. El enclave apareció cubierto con un manto de nieve. El calor característico del desierto fundió en apenas hora y media la nieve. Es el segundo año consecutivo que se registra este fenómeno. La anterior nevada se produjo en 1979.