El temporal que azota la Península registró ayer su máxima intensidad y se cebó especialmente en las comunidades del norte, que quedaron colapsadas por el frío, el viento y la nieve. La situación fue tan alarmante que Tráfico recomendó a los conductores aplazar hasta hoy sus desplazamientos por carretera. La peor parte se la llevó Castilla y León, donde más de 3.000 vehículos se quedaron parados a causa de la nieve en la carretera de Burgos, que permaneció bloqueada desde el kilómetro 156 al 242.
La carretera de Burgos --cortada en Aranda de Duero y Lerma-- quedó prácticamente intransitable. Según Protección Civil, unos 3.000 vehículos se encontraban a última hora de la noche de ayer parados a causa de la nieve entre Lerma y Burgos capital. Además, otros miles de coches --las autoridades no concretaron el número-- estaban también atascados entre Burgos capital y Briviesca.
En León, unos 205 pueblos quedaron incomunicados y el Ejército se mostró dispuesto a intervenir para ayudar los más de 12.290 vecinos aislados. De hecho, los agentes de la División Acorazada Brunete fueron movilizados a última hora de la tarde. En Palencia, otra veintena de pueblos quedaron incomunicados a causa de la nieve.
NEVADA INSOLITA EN 15 AÑOS En algunos municipios de la comunidad, como Peranzanes, hacía 15 años que no se veía una nevada tan impresionante, según explicaron los vecinos.
En las calles de León capital --que amaneció con una capa de más de 10 centímetros de nieve, como en Burgos-- los servicios de emergencia tuvieron que esparcir más de 100 toneladas de sal.
Cataluña tampoco se libró del temporal. El fuerte viento provocó que la Generalitat pusiera en marcha el nivel 1 de alerta --situación de riesgo-- en las comarcas Alt Empord , Baix Empord , Baix Camp, Baix Ebre y Montsi . En la comunidad valenciana se decretó la situación de preemergencia por vientos y temporal marítimo. La Generalitat aconsejó revisar ventanas y puertas. Además recomendó no pasear cerca de árboles ni carteles publicitarios.
En cambio, en las carreteras de Extremadura no estaban ayer afectadas por la ola de frío y ni tan siquiera en la zona norte de Cáceres, donde suele haber más problemas con la nieve y el hielo, había dificultades, por lo que el tráfico fue normal en toda la región, según explicaron a Efe la Jefatura de Sala del 112 y la Guardia Civil de Tráfico.
